Rutinas saludables para el día a día
Es difícil mantener unos hábitos saludables en nuestro día a día. La imposibidad de compaginar el ejercicio, la buena alimentación y la relajación con nuestro ritmo de vida en ocasiones apabullantes no hace ningún bien a nuestro organismo. Por eso hoy, en Espacio Z, te traemos unos consejos que ayudarán a que tu rutina diaria sea más saludable.
1.-Estiramientos matutinos
Es muy importante conservar la salud de nuestros músculos, sobre todo en estaciones frías como el otoño o el invierno. Cada mañana después de levantarnos, podemos ejercitar nuestro cuerpo con una simple rutina de estiramientos que no nos ocupará más de 10 minutos de nuestro tiempo. Es recomendable efectuar esos estiramientos en orden, comenzando por los pies y los tobillos, subiendo por las piernas y acabando en nuestro cuello. Para ello, deberemos tensar al máximo nuestros músculos durante 5 segundos y después relajarlos. Esto ayudará a que se oxigenen y nos permitirá sufrir menos dolores musculares en nuestro día a día.
2.- Masticar bien los alimentos y comer sin prisas
Aunque nuestro horario esté demasiado ajustado, debemos planificar nuestro tiempo para comer con antelación para que éste no sea atropellado. Masticar y triturar bien la comida que ingerimos ayudará a que nuestro proceso de digestión sea más adecuado y requiera de menos esfuerzo para nuestro aparato digestivo. Además, comer sin demasiada prisa -recomendamos dedicar una hora de nuestro tiempo a esta tarea- nos ayudará a establecer un necesario tiempo de ‘relax’ que ayudará a continuar con nuestro día con plenitud de fuerzas.
3.- La hidratación es muy importante
Mantener nuestro organismo hidratado es, probablemente, una de las mejores y más sencillas formas de evitar cefaleas y cansancio general en nuestro día a día. Tener una botella de agua cerca en nuestro puesto de trabajo es muy recomendable para que el cuerpo pueda eliminar las toxinas de una manera más sencilla. Lo recomendable es beber entre uno y dos litros y medio de agua diarios. Al fin y al cabo, el 60% de nuestro cuerpo está formado por agua.
4.- Combatir el sedentarismo
Si bien en muchas ocasiones nuestro puesto de trabajo nos obliga a permanecer sentados durante mucho tiempo, ese sedentarismo es uno de los mayores enemigos de nuestra salud. Además, esta rutina nos hace estar muy cansados al final del día, lo que normalmente ‘solucionamos’ volviéndonos a sentar en nuestro sofá. Este descanso ficticio no es más que una prolongación del sedentarismo, y hay que combatirlo. Es recomendable encontrar al menos 30 minutos diarios para andar o hacer algún tipo de ejercicio aeróbico.
Esperamos que os hayan servido estos pequeños consejos. Son fáciles de asumir y a buen seguro os ayudarán a establecer una rutina diaria que mejorará nuestra salud poco a poco. Simplemente debemos ser constantes, la mejora en nuestra salud vendrá sola. Como decía Lao Tzu, ‘la salud es la mayor posesión y la alegría el mayor tesoro‘.