Pilates: Historia y curiosidades
Seguro que muchas de las personas que estáis leyendo esto habéis asistido alguna vez a una de nuestras clases de pilates. Pero, ¿cuántos conocéis su historia? ¿Os habéis preguntado alguna vez a quién se le ocurrió?. Si es así, este artículo os resultará familiar. Si no, además de aprender el origen de este fantástico método para cuidar nuestro cuerpo, conoceréis algunas de las curiosidades que hacen del pilates una disciplina especial y necesaria.
Historia del método Pilates.
Nos remontamos a principios del Siglo XX. El joven Joseph Hubertus Pilates acude al colegio cada día y todos sus compañeros se ríen de su débil físico. Además, sufre de asma y raquitismo, entre otras enfermedades. Era, básicamente, un blanco fácil para las críticas. Cansado de esta situación, decidió estudiar la anatomía del cuerpo humano con el fin de acabar con sus enfermedades. Además, conoció la filosofía oriental y aprendió a controlar su respiración, sus impulsos mentales y a mejorar su autoestima. Y vaya si lo consiguió. Tal fue su mejora que comenzó a ganar musculatura y eso le llevó a posar como modelo en algunas de las revistas de moda de la época. También a hacerse un nombre en el mundo circense.
En 1912 -cuando ya era una estrella del circo- se trasladó junto con su hermano a Inglaterra, donde giraban anunciándose como ‘la estatua griega viviente‘. Desgraciadamente, la Primera Guerra Mundial le sorprendió en Lancaster y, debido a su ascendencia alemana, fue internado en un campo de concentración. Pero el joven Joseph no cejó en su empeño y, en aquel campo, ayudaba a los internos a mejorar su estado físico con tablas de ejercicios que él les proponía.
Después, trabajó como camillero en el campo de concentración de la Isla de Man, y eso supuso un punto de inflexión en su carrera. Dado que la mayoría de los pacientes a los que ayudaba no eran capaces de moverse de sus camas, puso un sistema de muelles en las mismas en los que los heridos reposarían sus extremidades. Esto fortalecería su musculatura y mejoraría su estado físico. También hizo lo propio con veteranos de guerra con movilidad reducida, a los que ayudó instalando un sistema de cuerdas en sus camillas que inmovilizaba sus extremidades. Aquel era el nacimiento de sus máquinas de ejercicios: cadillac y reformer.
La fama que cosechó por aquel entonces le valió el ofrecimiento del gobierno alemán para entrenar a su ejército. Rechazó esa propuesta y decidió exiliarse en EEUU y poner en marcha un gimnasio en el que pudiera llevar a cabo sus técnicas. Alquiló un local cercano a estudios de danza y teatro y, con ayuda de su hermano Fred -carpintero de profesión- construyó las máquinas que le permitían ejercer su método. Por respeto a la tradición, aún se siguen fabricando en los mismos materiales que entonces -madera y acero-.
Pronto se correría la voz en Nueva York -ciudad donde tenía su local de entrenamiento- de su infalible método. Muchos bailarines y coreógrafos visitaban su local, e incluso algunos de ellos añadían a sus coreografías muchos de los ejercicios del método Pilates. Esta fama se extendió hasta llegar a actores de Hollywood, deportistas, y otras celebridades que aseguraban que su método era eficaz a la par que divertido. Y no es para menos. Como el propio Joseph Pilates dijo; «Estoy cincuenta años adelantado a mi tiempo.» Y tanto que sí.
Para terminar, os vamos a dejar con cinco datos que probablemente no supieras sobre este fantástico método.
- Su primer nombre fue ‘Contrología‘, debido a la importancia del control mental en su práctica.
- El pilates mejora las relaciones sexuales, ya que fortalecer nuestro suelo pélvico es una de sus principales funciones.
- Es la disciplina preferida de los famosos. Madonna, Uma Thurman o Jodie Foster son algunas de sus fervientes defensoras.
- El método Pilates es apto para todos los públicos. No temáis que vuestros hijos lo practiquen, ya que también mejorará su estado físico.
- Es inclusivo, y se puede fusionar con otras disciplinas. Ya existen ‘mezclas’ como el ‘Piloxing’ -combinado con boxeo- o el ‘Yogalates’.
Os esperamos para que practiquéis esta fantástica disciplina en nuestro centro Esenzias (podéis consultar nuestras tarifas en este enlace). ¡Recordad que la primera clase es completamente gratuita y sin compromiso!